Con el tiempo valoras más el paso por el CD.Caspe
José Manuel Piazuelo Roca deja pasar la pelota entre las piernas en un partido frente al Universidad de Zaragoza. Imagen del Periódico de Aragón del año 2001.
A José Manuel Piazuelo Roca "Chipri", jugador del CD.Caspe en el paso de los siglos XX al XXI, le vienen a la memoria unas cuantas anécdotas de los tres años que vistió la camisola caspolina
Creo recordar el partido contra Peñas Oscenses en el Alcoraz. Conseguimos la victoria, dos a cuatro, pero es el campo más largo y más grande en el que he estado en mi vida. Le decía a Máñez, tíramelas largas, y a la quinta o sexta que me tiró, le dije, para, para, que ya no puedo más. Ese partido lo recuerdo bien porque al final pude hacer dos tantos, sí, dos goles.
En la memoria de todo jugador que haya pasado por las mágicas manos de Pilar Sancho Gallús "Pilarín" siempre está presente la profesionalidad y cordialidad que desplegaba con todos
Recuerdo bien a Pilarín. Cuando me lesioné me decía, ven los lunes, miércoles y viernes a casa, te hago unos masajes y el domingo a jugar. A mi me hacía muchísimo daño la rodilla. Y ella me estiraba tanto los dedos del pie que al final me dolían más los dedos del pie que la rodilla. Es verdad, que, por lo menos, nunca me marchaba sin merendar porque hacía unas galletas caseras que estaban buenísimas.
Con la edad se comprenden ciertos comportamientos que en su momento no se valoran correctamente, y Chipri trae a colación el seguimiento que hacía su padre de todos los partidos que jugaba
Ahora recuerdo que mi padre no se perdía ningún partido, ya fuera en Caspe o a quinientos kilómetros, siempre estaba allí. Y ahora le das esa importancia que antes no se la dabas. Está muy bien recordar cosas así.
